¿Cómo te comunicas con tus hijos?

A menudo escucho a algunas madres decir: “¡mi hijo no me cuenta nada del cole! Le pregunto pero no le saco nada, es que es muy callado”

Da igual la personalidad de los pequeños. Tanto si son introvertidos, como extrovertidos, si la pregunta es la apropiada, seguro que os sorprenderá la amplitud de la respuesta.

Siempre que habléis con ellos debéis formular preguntas abiertas. Es decir, evitad preguntas cerradas del tipo: “¿Cómo te ha ido el día?”, pues la respuesta más rápida será “bien”, y ahí acabará la conversación.Si a vuestro hijo le cuesta hacer amigos, podéis preguntar ¿con quién has jugado hoy? ¿A qué has jugado? ¿Qué es lo que más te ha gustado de tú día?

Liz Evans, en su artículo 25 formas de preguntar a tus hijos “¿Cómo ha ido el día en el cole?” propone una serie de preguntas abiertas para plantear a los hijos. Con ellas ha conseguido que las respuestas de sus hijos sean más elaboradas y aporten mucha más información sobre sus sentimientos y experiencias.Y es justamente así cómo debemos hablar con nuestros hijos. Los niños no suelen contar cómo se sienten. Normalmente su comportamiento nos puede indicar  cuál es su estado de ánimo. Pero hay niños que no dan ninguna señal y para cuando queremos darnos cuenta de que algo va mal, ya es demasiado tarde y el problema se ha hecho tan grande, como la solución a adoptar.

Intentar estar informados de lo que pasa por sus mentes y de sus vivencias no significa hacerles un tercer grado. Podéis comenzar con preguntas positivas, en las que ellos puedan expresar las cosas buenas que les han ocurrido en la escuela y desde ahí pasar a preguntas divertidas en las que también puedan mostrar aquello que no les gusta o que les hace sentir mal.Si tenéis la oportunidad de leer el artículo de Liz Evans, leed la pregunta número 12 “Si una nave de alienígenas llegara a tu clase y se llevara a alguien, ¿a quién querrías que fuera?”Personalmente creo que es una de las formas más ingeniosas para que nuestros hijos se sinceren con nosotros. Seguramente comiencen con una respuesta sencilla y poco a poco vayan ampliando su contestación, explicándonos el porqué de su rechazo hacia un determinado compañero.

Conocer a nuestros hijos es importante, pues es la mejor manera de poder apoyarlos cuando nos necesiten.Escuchar a nuestros hijos, además, les hará sentir que sus ideas son importantes y les hará sentirse bien consigo mismos. Si les enseñamos a escuchar con nuestro ejemplo, ellos mismos aprenderán a escuchar y a respetar las opiniones de otras personas.

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